El modelo de franquicias en México presenta una situación compleja, donde solo un 6% de las franquicias supera la década de operación o cuenta con más de 100 unidades. Según Jorge Valencia, presidente del Instituto Latinoamericano de la Franquicia, esta realidad subraya la importancia de la preparación y el conocimiento antes de invertir, dado que el 74% de las franquicias son marcas inexpertas que tienden a fracasar antes de cumplir cuatro años.
La inversión inicial para establecer una franquicia en el país se compone de dos partes. Primero, se debe pagar entre 250,000 y 300,000 pesos por el uso de la marca, que incluye acceso a manuales y capacitaciones. La segunda parte, que oscila entre 500,000 y 600,000 pesos, está destinada a la adecuación del local, incluyendo mobiliario y equipos necesarios para la apertura.
Para maximizar las posibilidades de éxito, Valencia destaca la necesidad de evitar errores comunes al invertir. Entre ellos, no tener capital suficiente para cubrir imprevistos y elegir la franquicia sin realizar la debida investigación sobre la marca y su trayectoria.